Sex Story es el título. Philippe Brenot, su autor. ¿Quién es Philippe Brenot? Un psiquiatra, antropólogo, sexólogo y director de enseñanzas de Sexología y Sexualidad Humana en la Universidad Descartes, en París. Él es el responsable principal de la edición de Sex Stroy: La première histoire de la sexualité en BD, obra única y original en la que, de una manera divertida e ilustrada, se intenta plasmar la historia de la sexualidad humana. Para llevar a cabo dicho proyecto, Brenot ha contado con la aportación imprescindible de la ilustradora francesa Laetitia Coryn.

La edición de Sex Story ha supuesto una pequeña revolución en el panorama editorial francés. Polémica como desgraciadamente acostumbran a resultar todas las propuestas culturales que, de un modo u otro, guardan relación directa con el sexo o el erotismo; Sex Story ha sido muy bien recibido tanto por su modo ingenioso de abordar la historia de la sexualidad como por sus contenidos. Ayudar a desmontar ciertos prejuicios sociales, desvelar dudas que puedan existir referentes a la sexualidad y aventurar teorías sobre cómo pudo vivirse la sexualidad en determinados momentos de la historia o sobre cómo puede vivirse en un futuro más o menos cercano, son algunas de las virtudes de Sex Story.

Las formas del amor y la pareja

La calidad de Sex Story está garantizada por el prestigio de su autor. Philippe Brenot, más allá de su trabajo como profesor universitario y contrastado estudioso de la sexualidad humana, es colaborador habitual del diario Le Monde. Es en el prestigioso diario francés donde Brenot escribe su blog Liberté-Egalité-Sexualité en el que aborda, de manera divulgativa, los temas más variados relacionados con la sexualidad. En España, Philippe Brenot tiene publicadas dos obras, El sexo y el amor, editado por Paidós Ibérica, y El diccionario de Arturo y Cloé, editado por Gedisa y que pretende ser una aproximación a la vida afectiva y sexual de los adolescentes. En El diccionario de Arturo y Cloé, Philippe Brenot contesta a las doce preguntas más comunes que los jóvenes suelen hacerse respecto al sexo.

Brenot, estudioso de las formas de amor, destaca cómo lo que se conoce como “mundialización del amor” llegó en la década de los treinta del siglo pasado. A esta mundialización, señala el profesor Brenot, le sucedieron dos mundializaciones más. Una de ellas, la de la libertad sexual para mujeres y homosexuales, tuvo lugar en los años 70. La actual es la que Philippe Brenot llama la mundialización del porno. A esta última mundialización, señala Brenot, hay que achacar la expansión de un modelo de comportamiento sexual poco natural que puede acabar resultando muy frustrante para mucha gente.

Luchar contra los efectos perniciosos de la mundialización del porno es, entre otros, uno de los objetivos de Sex Story. Para ello, Philippe Brenot considera fundamental aunar las visiones de la Sexología y la Antropología en el estudio de la sexualidad humana. Es decir: hay que conocer la influencia que sobre el comportamiento sexual de la persona tienen tanto la propia psicología y las características biológicas propias como los comportamientos sociales mayoritarios.

Brenot, como analista de la pareja, apunta cómo la pareja moderna es principalmente fruto de la liberación de la mujer. Sólo la igualdad de derechos de la mujer respecto al hombre permitió el nacimiento de un tipo de pareja que sustituía al antiguo modelo patriarcal, aquél en el que el hombre ejercía el poder absoluto en el seno de la pareja. Ese nuevo modelo de pareja que nació tras la liberación de la mujer es, sin embargo, y según apunta Brenot, un modelo muy inestable. De ahí el número de divorcios que se dan en nuestra sociedad. Para Philippe Brenot, el problema para muchas parejas reside en el hecho de haber sacralizado la pasión. Antes se daba por entendido y se asumía que a la pasión inicial propia del inicio de toda relación acababa sustituyéndola el cariño. Ahora, por el contrario, se persigue una relación en la que la pasión no decaiga en ninguna de las fases de la vida de la pareja. Sin duda, algo muy difícil de conseguir.

Para salvar este tipo de pareja (Brenot desconfía de las posibilidades de éxito futuro del poliamor o las parejas abiertas), el autor, junto a Laetitia Coryn, de Sex Story, apunta a reforzar la educación sexual. Comprender el funcionamiento de nuestra sexualidad resultaría determinante para reforzar la estabilidad de nuestras parejas.

La importancia del autoerotismo

Brenot considera que la historia de la sexualidad enseña que ésta es, en gran medida, algo aprendido. Y que de ella depende nuestro equilibrio personal y el equilibrio con nuestra pareja.

Sex Story, además, se convierte en un anecdotario muy entretenido para todos aquellos lectores que quieren curiosear sobre el variopinto universo de la sexualidad. Por ejemplo: gracias a Sex Story podemos conocer la “fiebre uterina” de la Reina Victoria de Inglaterra, el coleccionismo de amantes de la escritora George Sand, la adicción al sexo de Víctor Hugo o la homosexualidad de Miguel Ángel. Gracias a Sex Story, también, podemos saber hasta qué punto era liberal en materia sexual la sociedad del Antiguo Egipto. La miel de semillas de acacia, por ejemplo, era utilizado por las antiguas egipcias como espermicida. Impregnándose con ellas la vagina, las compatriotas de la mítica reina Cleopatra, amante de Julio César y de Marco Antonio e inspiradora futura de novelas y películas made in Hollywood, intentaban evitar el quedarse embarazadas. La propia Cleopatra, por su parte, llegó a utilizar, según se sostiene en Sex Story, el primer vibrador. Éste, elaborado con papiro, contenía en su interior abejas vivas que, revoloteando, proporcionaban al vibrador real esa vibración que servía para que la mítica Cleopatra practicara el autoerotismo.

Éste precisamente, el autoerotismo, es considerado por Philippe Brenot uno de los pilares básicos para avanzar en el conocimiento de la propia sexualidad y en su mejora. El sexo con uno mismo, sostiene Brenot, es muy importante.

Mientras esperamos la edición en España (aún no está prevista) de Sex Story, desde aquí seguiremos insistiendo, junto a Brenot, en la importancia del autoerotismo y la masturbación. A ella ya hemos dedicado algún que otro post en nuestro blog. Hemos hablado de los juguetes eróticos para la masturbación femenina, de los maravillosos masturbadores de la marca Tenga para la masturbación masculina, de sus no menos fantásticos huevos masturbadores, de los vibradores de lengua, de las bocas masturbadoras, de los masturbadores masculinos en general, del vibrador rampante, de los vibradores para el punto G… de un sinfín de juguetes eróticos que puedes encontrar dentro del catálogo de juguetes eróticos de SexshopDreams.

Como puedes comprobar por el amplio número de posts dedicados a algún tipo de juguete erótico relacionado con el mismo, el autoerotismo es uno de los temas preferidos de El Blog de Sexshop Dreams. En esta ocasión, y aprovechando la aparición en el mercado francés de ese fantástico trabajo de Philippe Brenot y Laetitia Coryn que es Sex Stroy: La première histoire de la sexualité en BD, no queríamos dejar de pasar la oportunidad, una vez más, de recomendar encarecidamente a nuestros lectores la práctica de la masturbación.