Nada mejor que los nombres de Adán y Eva para dar nombre a una empresa de juguetes sexuales. Después de todo, fueron estos personajes bíblicos los que inventaron el sexo. Si al hacerlo rompieron el mandato divino o no es algo que no viene a cuento. Sí importa que los nombres del primer hombre y de la primera mujer sea el de una de las más importantes empresas estadounidenses en la comercialización de todo tipo de juguetes eróticos.

Adam&Eve, fundada en 1971 por Phil Harvey, es hoy en día el mayor comercializador de juguetes para adultos de los Estados Unidos y figura como una de las empresas más antiguas del sector. Lo que empezó como una pequeña tienda de venta de condones y lubricantes en Carrboro, una población de Carolina del Norte, no tardó en convertirse en una empresa de referencia en la venta de productos por correo. Adam&Eve, prescindiendo de los canales farmacéuticos, comenzó a vender y distribuir preservativos por todo el país. Hoy en día es el distribuidor on line más importante de juguetes eróticos de todo tipo (vibradores, lubricantes, bolas chinas, plugs, extensiones para el pene, esposas, látigos…) preservativos y películas porno.

El proceso de crecimiento de Adam&Eve, sin embargo, no ha sido un camino de rosas. La llegada al poder de Ronald Reagan y su lucha contra lo que, desde la mentalidad conservadora de su grupo político, se consideraba inmoral, hizo que los enfrentamientos entre el Departamento de Justicia y Adam&Eve se hicieran frecuentes y enconados. La empresa, de hecho, llegó a ser ocupada en 1986 por las fuerzas del orden y su fundador, detenido por un breve período de tiempo. Esa lucha entre el Departamento de Justicia y Adam&Eve duró varios años. La llegada de nuevos aires políticos a la Casa Blanca consiguió que dicho enfrentamiento remitiese.

Hoy en día, Adam&Eve es una empresa muy bien considerada socialmente. En ello ha tenido particular influencia el hecho de que Adam&Eve destine una suculenta parte de sus beneficios (más del 20%, según datos de la empresa) a obras de filantropía social. Adam&Eve dona parte de esos beneficios a pequeñas organizaciones benéficas locales y a la DKT, una organización fundada por el propio Phil Harvey en 1989 y que se encarga de promover la planificación familiar y la prevención del VIH/SIDA en África, Asia y América Latina. La distribución de productos anticonceptivos accesibles y costeables es parte de esas tareas filantrópica de Adam&Eve. En 1975, Adam&Eve ya comercializaban condones en Bangladesh y Kenia. En 2004, DKT distribuyó en los tres continentes citados unos 390 millones de condones.

Otra de las peculiaridades de Adam&Eve, así como de PHE, Inc. (su empresa matriz) es el hecho de que los empleados puedan ser, al mismo tiempo, accionistas de la misma. Adam&Eve destaca este hecho como elemento que puede hablar del compromiso de los empleados de la empresa con el funcionamiento de la misma. Al mismo tiempo, Adam&Eve, como empresa receptora de millones de peticiones de productos por parte de sus clientes, presume de conocer, gracias a esas peticiones, las necesidades de las personas en cuanto a juguetes eróticos se refiere. Ese conocimiento permite a Adam&Eve comercializar aquellos productos que las personas esperar o, en su caso, impulsar su fabricación.

Adam&Eve Pictures, por su parte, es una de las empresas que forman parte de ese conglomerado de empresas que en el fondo es esta marca americana. Adam&Eve Pictures se dedica a la producción de películas porno. Muchas de estas películas figuran entre los films más premiados del sector. Ellos, junto a otros de otras productoras, forman un catálogo de aproximadamente 2.500 vídeos porno que los clientes que Adam&Eve pueden encontrar cuando se asoman a la página de esta empresa estadounidense.

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