Cada nuevo año trae nuevos propósitos. Hay quien se propone dejar de fumar y hay quien se apunta al gimnasio acuciado por los remordimientos tras los excesos cometidos durante las fiestas navideñas. La báscula actúa como imparcial e implacable notaria de esos excesos y el capón, los canelones, el turrón y los mazapanes dejan su huella en la línea y en el peso. Nosotros vamos a proponerte aquí un propósito que, de ser cumplido, seguramente te va a permitir disfrutar de lo lindo del año que acabamos de estrenar. El propósito es muy simple: comprar un Kama-Sutra y colocarlo, como libro de cabecera, en tu mesita de noche. Y leerlo, claro.

Aunque quizá pecamos de osados al proponerte su lectura. Quizá ya lo has leído. Quizá ya lo tienes junto al cabezal de tu cama. Quizá conoces ya todas sus posturas, todas sus recetas, todos sus consejos. Disculpa si es así, pero con este mítico libro escrito por el maestro Vatsyayana, se cree que entre los siglos III y VI de nuestra era, nos sucede como sucede con tantos y tantos libros de la Historia de la Literatura: que mucha gente habla de ellos pero que no son tantos los que, en verdad, lo han leído. Nombraríamos ahora mismo varios de esos libros, pero vamos a limitarnos a nombrar el que, culturalmente, nos coge más cercanos: El Quijote. No toda la gente que lo cita o lo nombra lo ha leído. Pues bien: con el Kama-Sutra sucede lo mismo. Por eso se tiene una idea equivocada de lo que el Kama-Sutra es.

La mayor parte de la gente cree que el Kama-Sutra es un libro en el que se describen, una tras otra, un sinfín de posturas eróticas. Y el Kama-Sutra es algo más que eso. El Kama-Sutra podría ser considerado una especie de tratado sobre el placer y sobre cómo conseguirlo. Compuesto por 36 capítulos, el Kama-Sutra aborda en sus páginas siete temas diferentes.

Esos temas tratados por Vatsyayana en el Kama-Sutra son los siguientes:

  • Nociones generales sobre el sexo y sobre el papel que éste desempeña en la vida humana.
  • Nociones sobre el acto sexual en sí. Vatsyayana dedica varios capítulos a describir y a aconsejar sobre cómo practicar los diferentes tipos de juegos sexuales, los preliminares eróticos, las diferentes posturas, los besos, el sexo oral e, incluso, los tríos.
  • Consejos para cortejar y elegir a una esposa.
  • Descripción de cuál debe ser el comportamiento correcto de una esposa.
  • Consejos sobre cómo comportarse con las mujeres de otros y sobre cómo seducirlas.
  • Reflexiones sobre las cortesanas y sobre cómo comportarse correctamente con ellas.
  • Consejos para atraer a otras personas.

El Kama-Sutra de Vatsyayana recoge también un listado de hierbas y pociones que deben servir para que se incremente la libido y la virilidad masculina. Los afrodisíacos, pues, también tenían cabida en este mítico libro.

Como se puede comprobar al hacer un listado de los temas tratados por Vatsyayana en su mítica obra, el <em>Kama-Sutra es mucho más que un simple catálogo de posturas eróticas. Es también un tratado de seducción y un muestrario de reglas y consejos destinados a incrementar el placer. De la India lo trajo a Occidente Sir Richard Burton, un investigador inglés que, en tiempos de dominio de la Gran Bretaña sobre la India, se dedicó a investigar la cultura india. Fue él quien trajo los textos del Kama-Sutra y él quien, gracias a la colaboración de la Sociedad Antropológica de Londres, distribuyó esos textos, traducidos, de forma privada entre una élite londinense que, de ese modo, pudo disfrutar de las enseñanzas del maestro Vatsyayana.

No hace falta decir que desde los tiempos de Vatsyayana a la actualidad son muchas las cosas que han cambiado en el terreno de las relaciones sexuales. Para empezar, el rol desempeñado por la mujer en la sociedad occidental es muy diferente que el que podía desempeñar una mujer de la India de hace quince o dieciséis siglos. Muchos de los consejos del Kama-Sutra, pues, pueden haber quedado obsoletos. ¿Quién va a probar según que mejunjes para potenciar su virilidad en tiempos en los que la industria farmacéutico-erótica ha inundado el mercado de todo tipo de cremas vigorizantes, de potenciadores de semen, de afrodisíacos diluibles o de cremas retardantes? ¿Cómo hacer caso a según qué formulaciones en tiempos de la Viagra?

Pero las mayores virtudes del Kama-Sutra siguen vivas y son, fundamentalmente, dos. La primera es la de hacer que, por su sola existencia, la sexualidad se convierta en tema de conversación y en materia digna de ser atendida. La segunda, la de inaugurar toda una bibliografía: la de los Kama-Sutras modernos que, despojados del olor a naftalina del Kama-Sutra original, se convierten en excelentes guías para que, gracias a su lectura y a los consejos encontrados en ellos, aprendamos a hacer mejor uso y disfrute de nuestra sexualidad y, con ello, aprendamos a ser más felices.

¿No crees que ése sería un gran objetivo a cumplir en el 2017 que acaba de empezar? Por eso te animamos a leer cualquiera de esos Kama-Sutras modernos que, inspirados en el <em>Kama-Sutra original, pretenden proveernos de los consejos y recomendaciones necesarias para convertirnos en mejores amantes.