La mayor feria de tecnología del mundo se celebra en Las Vegas (Nevada, EE.UU.). Recibe el nombre de CES y este año, por primera vez en sus más de cinco décadas de historia, la organización de la misma ha permitido que expongan en ella diversas empresas dedicadas al diseño y fabricación de juguetes eróticos. Con esta autorización, la organización del CES corrige la que creemos que ha sido una injusticia con una industria, la del juguete erótico, que día tras día apuesta por la mejora tecnológica de sus productos.
Para que la organización del CES apostara finalmente por dejar exponer juguetes eróticos en esta feria tecnológica ha sido necesario que el pasado año la feria se viera salpicada por un escándalo de considerables dimensiones. El CES acostumbra a otorgar cada año una serie de premios a la innovación. En la edición del pasado año, uno de esos premios recayó en la empresa Lora DiCarlo, que había desarrollado el robot Osé Robotic Massager. Poco después de serle otorgado el premio, la organización del CES se desdijo y se lo retiró. ¿El motivo? Que las reglas que imperaban en el CES indicaban que no podían optar a ningún tipo de galardón aquellos productos que, por algún motivo, fueran considerados “inmorales, obscenos, indecentes y profanos”. Y ésos, ni más ni menos, fueron los calificativos con los que se tildó al Osé Robotic Massager de Lora DiCarlo.
La reacción de los usuarios de éste y de otros juguetes sexuales no se hizo esperar. Iniciaron una campaña de protesta en las redes sociales utilizando como bandera el hashtag #CESGenderBias (prejuicios de género en CES). La campaña resultó exitosa hasta el extremo de que la organización de CES decidió, pasados unos meses, devolver a Lora DiCarlo la distinción que inicialmente le había sido otorgada. Para poner fin a la polémica, además, los organizadores de CES anunciaron que en este 2020, a modo de prueba, dejarían que las empresas de juguetes eróticos dispusieran en el CES de un espacio oficial.
Osé versus Satisfyer
De entre todos los juguetes eróticos expuestos en el CES, el Osé Robotic Massager, que venía precedido y, en cierto modo, aureolado, por la polémica del pasado año, ha vuelto a ser una de las estrellas. No en vano, lo que proporciona el producto estrella de DiCarlo a las mujeres no está nada mal: la doble estimulación, gracias a un dispositivo flexible, de clítoris y punto G. ¿Qué mujer puede rechazar tal posibilidad de placer?
Junto a DiCarlo, ha habido alrededor de una decena de empresas que han exhibido sus juguetes sexuales en el CES. Todas ellas han podido mostrar y promocionar sus productos en la zona del CES dedicada a los conceptos de salud y bienestar. Después de todo, no hay que perder de vista en ningún momento que el bienestar de la persona está íntima y directamente relacionado con la salud sexual. Sin una buena salud sexual no puede gozarse de un completo bienestar.
Una de las empresas estrella que ha aprovechado esta feria tecnológica de Las Vegas para mostrar sus productos eróticos y anunciar el lanzamiento al mercado de nuevos juguetes sexuales durante los próximos meses ha sido Satisfyer. Esta empresa, que se ha hecho mundialmente famosa por su succionador de clítoris, del que ya hemos hablado en este blog, hizo pública en el CES su intención de lanzar al mercado durante 2020 nada más y nada menos que 80 juguetes eróticos destinados a hombres, mujeres y parejas.
Satisfyer también ha aprovechado la feria tecnológica celebrada en Las Vegas para promocionar la app que acaba de lanzar al mercado. Esta app permite, entre otras cosas, que los dispositivos sexuales conectados a ella vibren al ritmo de la música, que el usuario o usuaria pueda crear una playlist de vibraciones personalizadas o que las parejas puedan utilizar los dispositivos para controlar los juguetes desde la lejanía y, así, poder mantener “sexo a distancia”.
Crave, Myhixel y MysterVibe
Otra de las empresas fabricantes de juguetes eróticos que ha aprovechado el CES para promocionar sus productos ha sido Crave. Esta empresa norteamericana, con sede en San Francisco, se ha especializado en el diseño y fabricación de anillos y collares de lujo vibradores. La apuesta por estos vibradores “de lujo” no es gratuita. Con ella, el equipo de Crave pretende no solo poner al alcance de la clientela un producto que resulte funcional. Pretende también, según declaraciones de personas de la empresa, lanzar un mensaje de empoderamiento a las posibles compradoras de esos productos. Y es que los productos de Crave expuestos en CES deben servir, sostienen sus creadores, para que el estigma que pesa sobre los productos procuradores de placer, especialmente en Estados Unidos, pierda virulencia y, de una vez por todas, se derriben y venzan los tabús que oscurecen la tarea que a diario desempeña la industria del juguete erótico.
Uno de esos tabús, muy arraigado en la sociedad estadounidense, tiene que ver con la relación mental que habitualmente se establece entre los conceptos de juguete erótico y el concepto del porno. Demostrar que no es así y que el sex toy es un tipo de producto que tiene que ver no tanto con lo porno como con la salud sexual es uno de los objetivos de la empresa de juguetes eróticos Myhixel. Myhixel, consciente de que uno de los problemas de carácter sexual que más afectan a las parejas es el de la eyaculación precoz, ha expuesto en CES una serie de dispositivos diseñados por ellos y cuya principal función es ayudar al hombre a controlar sus posibles problemas de eyaculación precoz. Gracias a dichos dispositivos, muchas parejas de largo recorrido, de ésas en las que la pasión ha perdido el ímpetu de los primeros tiempos, podrán ver cómo se reactiva su vida sexual.
Reactivar la vida sexual de las parejas que ha sido hecho presas de la rutina es, también, uno de los objetivos fundamentales de una de las empresas que han expuesto sus juguetes eróticos en la feria tecnológica de Las Vegas. Esa empresa es MysterVibe, que ha creado una serie de vibradores flexibles destinados a introducir nuevos alicientes eróticos en la vida de pareja.