Hace un tiempo dedicamos en nuestro Blog un artículo a los juguetes eróticos destinados al placer lésbico. Desde entonces teníamos una cuenta pendiente con el colectivo gay. Hoy queremos saldar esa cuenta. La industria del juguete erótico ha creado una amplia gama de productos eróticos que sirven para añadir sal y pimienta a las relaciones sexuales entre hombres. De hecho, no es difícil pensar que son mucho más numerosos los juguetes eróticos creados para satisfacer las necesidades sexuales del hombre gay que los juguetes eróticos destinados al hombre heterosexual. Y es que no faltan estadísticas que apuntan a que los hombres gais son más proclives a utilizar juguetes eróticos que los hombres heterosexuales.

Seguramente el juguete erótico para gais por excelencia es el plug anal. Al plug anal podríamos definirlo como una especie de dildos que, con forma de cono, sirven para insertarse analmente. Ese cono suele tener en su base un diámetro de unos cuatro centímetros y poseen una especie de peana que impide que el plug pueda perderse en las profundidades del ano o, incluso, pueda ir a parar al recto. Una vez insertado este juguete erótico para gais en el ano, la peana sobresale. Esta peana puede llevar añadida una colita de imitación animal (una cola de caballo, por ejemplo; o un rabito de cerdo) para introducir un toque fetish y lúdico en las prácticas sexuales. Por su parte, la parte del plug que se introduce en el ano puede ser lisa, estriada o, en algunos casos, adquirir la forma de una torre de bolas.

Otro de los juguetes eróticos para gais más apreciados es lo que conocemos como cokrings, es decir, anillos que sirven para ayudar a mantener y potenciar la erección al impedir el retorno de la sangre al abdomen. Anillos para el pene hay de muchos tipos. Los hay que se colocan justo después del glande, en la punta del pene; los hay que se colocan en la base del mismo y los hay que sirven, también, para “abrazar” los testículos. Este último tipo de anillos se colocan tras el escroto y sirven para aumentar las sensaciones experimentadas por el hombre en sus genitales.

A la hora de escoger un anillo para el pene es recomendable optar por anillos realizados con materiales elásticos como pueden ser la silicona, el gel o la goma. Este tipo de anillo se adapta a penes de todos los tamaños y es más fácil de retirar que un anillo rígido. Al utilizar un cokring hay que tener en cuenta una serie de consejos. El primero de ellos es que no hay que tener durante mucho tiempo un anillo para el pene puesto. El segundo, que es recomendable rasurar los genitales para que el anillo no se enrede en el vello púbico. Finalmente, quien desee utilizar un anillo para el pene deberá tener en cuenta que es muy aconsejable utilizar lubricantes para ponerlos y extraerlos.

Y es que el lubricante es uno de los principales productos eróticos para gais. Adquiriendo el sexo anal el protagonismo que adquiere en el sexo gay y entendiendo que los conceptos sexo anal y lubricante siempre van de la mano, escoger un buen lubricante es siempre importante. Un buen lubricante permitirá disfrutar como se debe de la penetración anal y de los juegos en los que participen plugs anales y dildos.

Entre los juguetes eróticos para gais, los dildos especialmente diseñados para facilitar la estimulación prostática son algunos de los juguetes más valorados por el público gay. En nuestro artículo dedicado a la estimulación del punto P vimos cómo la estimulación de la próstata puede servir para que el hombre (homosexual o no) pueda alcanzar un orgasmo mucho más intenso. El hombre gay que quiera masturbarse o la pareja gay que quiera introducir un juguete erótico para gais en sus relaciones sexuales encuentran en estos dildos diseñados para estimular el punto P un poderoso aliado a la hora de disfrutar de su sexualidad.

Existen muchos tipos de estimuladores prostáticos. Hay modelos especiales para hombres que se están iniciando en el placer anal, modelos un poco más gruesos destinados a hombres que gustan de las sensaciones un poco más fuertes y modelos en forma de “u”. Éstos últimos acostumbran a tener vibración y, fabricados con silicona médica o PVC, estimulan tanto el interior del ano como la zona del perineo.

Otro juguete erótico que puede resultar muy estimulante para el hombre homosexual son las bolas tailandesas o anal beadshttps://sexshopdreams.com/1099-anales, una ristra de bolas de gelatina o silicona unidas a un cordón del mismo material que, introducidas en el ano, sirven para estimular el mismo y aumentar la intensidad del orgasmo.

Un juguete erótico para gais que tiene muchos adeptos entre los hombres homosexuales son los estimuladores de pezones. Los estimuladores de pezones son pequeñas almohadillas vibradoras que, llenas de puntitos de silicona, se aplican sobre esa zona tan sensible como son los pezones. Los hombres gais que gusten del juego BDSM, por su parte, podrán optar, a la hora de buscar un juguete erótico para gais, por el uso de las pinzas para pezones. La combinación de dolor y placer que pueden provocar estas pinzas puede resultar muy estimulante para el juego erótico gay.

No hace demasiado tiempo dedicamos en nuestro blog un artículo entero a las fundas para el pene. Las fundas para pene pueden ser, también, un magnífico juguete erótico para gais. Estriadas o no, las fundas para pene pueden añadir un plus de excitación a las relaciones homosexuales.

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